domingo, 24 de noviembre de 2013

Salbuchi: ¿UNA NUEVA JUDEA EN PATAGONIA?

El economista y patriota argentino Adrián Salbuchi expone resumidamente el estado de avance de la implantación sionista en Chile y Argentina, especificamente en la Patagonia.
Adrian Salbuchi pone el dedo en la llaga sobre el peligro sionista que se cierne sobre la Región Patagónica, tanto de Chile como de Argentina.

Documento reproducido de
http://actualidad.rt.com/expertos/salbuchi/view/83045-avanza-creacion-nueva-judea-patagonia-blog-salbuchi

Como ya comentamos en RT Español, hay indicios alarmantes de que los Dueños del Poder Mundial, en general, y el sionismo internacional, en particular, están urdiendo una compleja maniobra tendente a erigir un segundo estado judío en la Patagonia argentino-chilena.

Esta estrategia de larga data hoy se ve potenciada y acelerada debido a la situación insostenible del primer Estado Judío en la Palestina Ocupada. En verdad, Israel es un ente geopolítico artificial que sólo puede sostenerse por la violencia y gracias al apoyo incondicional que le brinda Estados Unidos: nación crecientemente idiotizada, desculturizada e, incluso, narcotizada.
 

Primero, vinieron por la Argentina… 


Los Dueños del Poder Mundial han logrado un control virtualmente total sobre la Patagonia Argentina, no a través de la violencia como en Palestina, sino a través de la imposición de gobiernos decadentes y traidores en la actual Argentina 'de la democracia'.
 
A lo largo de más de treinta años, éstos han desarticulado todo vestigio de defensa territorial. Peor aún, han destruido la educación y la conciencia nacional reemplazando el sano nacionalismo heredado de los Padres de la Patria y de la doctrina de Juan Perón por una subcultura perversa, antinatural, antiestética y mentirosa. En este sentido, podemos decir que la Argentina es una nación derrotada. Y por partida doble. 
 
Su primera derrota fue militar: en la guerra internacional por las Islas Malvinas disparada en 1982 por una generación de militares y civiles miopes y sin grandeza que cayeron estúpidamente en la trampa urdida por el Reino Unido, Estados Unidos y la OTAN. Resultado: esas potencias hoy mantienen una poderosa base militar nuclear frente a las costas patagónicas, potenciada en 2008 con la reactivación de la Cuarta Flota del Atlántico Sur ordenada por el gobierno de George W Bush. 
 
Su segunda derrota fue en el plano político y cultural: ante el terrorismo marxista que desató una guerra social y civil en la Argentina durante los años 70 y 80, cuyas dolorosas consecuencias la sociedad argentina sigue sufriendo. Resultado: los guerrilleros y terroristas derrotados en el plano operativo ayer, triunfaron en lo cultural y político y hoy ocupan la Casa Rosada, el Congreso y muchos multimedios en la Argentina. Ejemplos paradigmáticos: Nilda Garré de Abal Medina, alias Comandante Teresa cuando integraba la guerrilla, ocupa el ministerio de defensa y hoy el de seguridad interior bajo los Kirchner; Horacio Verbitzky, ex jefe de inteligencia del grupo terrorista Montoneros hoy dirige el periódico fundamentalista pro-Kirchner 'Pagina12'.  
 
Un triste barómetro de la decadencia intelectual y moral que infecta a las otrora poderosas fuerzas armadas argentinas lo comprobamos en la manera en que desde hace treinta años sus jefes militares toleran sumisamente todo tipo de insultos, humillaciones y vejaciones, incluso, el ser 'mandados' por una 'comandanta' en jefe bipolar. Sucesivas cúpulas militares han devenido en una corporación floja y amorfa que parece haber olvidado su juramento de defender el territorio nacional ante graves peligros externos e internos que acechan. 
   
En el caso de la Patagonia Argentina, seguramente veremos a estos 'jefes' militares de juguete llorar mañana como mujeres lo que hoy no se atreven a defender como hombres. 
   

¡Ahora, Chile!


Pero los poderes mundialistas y sionistas no operan solamente de un lado de Los Andes en su vocación disociadora e infiltradora. El avance del sionismo internacional que desea ver un segundo estado judío en la Patagonia también lo verificamos en la República de Chile, cuyo presidente Sebastián Piñera nombró en noviembre 2012 a Rodrigo Hinzpeter como ministro de defensa, un hombre íntimamente vinculado al Estado de Israel y participante regular del Comité Judío-Americano. Antes de hacerse cargo de esta importantísima cartera, Hinzpeter se desempeñaba varios años como ministro del interior.
 
En un amplio informe del periódico chileno 'El Ciudadano' la dupla Piñera-Hinzpeter pretende redimensionar la defensa chilena para que "se cuadre con la tríada Estados Unidos-Colombia-Israel", agregando que "todo apunta a que Hintzpeter mantendrá una doctrina de defensa y política militar semejantes a la de Colombia, y alineará a Chile con los objetivos del Comando Sur de los Estados Unidos establecidos para la base que construyeron en Concón".  A pesar de estar formalmente asignada a "tareas de Fuerzas de Paz de Naciones Unidas", la dependencia de mando y operación responde al Comando Sur del Ejército de Estados Unidos.
 
Hinzpeter y Piñera parecen coincidir en apoyar la política de 'defensa' que desean imponer los Dueños del Poder Mundial, por cuanto en la base militar de Concón ya existe un comando de Operaciones Militares en Territorios Urbanos.
 
Seguramente, se avanzará en el plan de reorientar a las fuerzas armadas chilenas a "combatir la insurgencia, la delincuencia y el narcotráfico", igual que en México y Colombia. O sea, unas fuerzas armadas con funciones ya no de defensa territorial ante amenazas extra-continentales, sino de seguridad y control policial interno. Así, a futuro podrán operar como controladores de la población local, alineadas a los objetivos e intereses financieros, económicos, políticos y sociales del venidero Gobierno Mundial. 
 
Agrega este informe que "todo indicaría que de la mano del presidente Piñera, Hinzpeter hará todo lo posible por impulsar la denominada 'Primera Estrategia Nacional de Seguridad y Defensa'" que, en concreto, abre la puerta a que las fuerzas armadas chilenas participen en operaciones de represión de sus ciudadanos dentro del territorio nacional, con la excusa de "combatir a la delincuencia en sus distintas expresiones". 
 
Cuando Sebastian Piñera asumió como presidente de Chile en 2011, la Agencia Judía de Noticias tituló esta noticia señalando que "un judío será el próximo ministro del interior y jefe de gabinete del presidente electo Piñera". Claramente, en la Embajada de Israel en Santiago, en Tel Aviv y entre las poderosas organizaciones sionistas y judías el encumbramiento de Hinzpeter en el gobierno de Chile no pasó desapercibido.
 
Continúa este informe señalando que “diversos medios destacaron que el hoy titular de la cartera de defensa es muy cercano al American Jewish Committee (Comité Judío Americano), poderoso grupo de presión sionista en Estados Unidos y América Latina, que opera mancomunadamente dentro de una nutrida red de grupos de presión y poder sionistas pro-Israel en la región y en el mundo entero. 
 
Se señala también que en marzo de 2011, mientras el presidente Piñera se encontraba de gira por Medio Oriente, una delegación del Comité Judío-Americano conformada por 18 miembros fue recibida silenciosamente en el Palacio de la Moneda en Santiago por el ministro Hinzpeter y los embajadores de Estados Unidos, Inglaterra e Israel. Dicha visita se extendió por tres días, pero la prensa nacional mantuvo 'discreto silencio' sobre la misma, sobre qué se discutió, quiénes asistieron y a qué acuerdos llegaron.  
 
Ya en 2006 Hinzpeter había participado en un congreso de comunidades judías latinoamericanas organizado por el Comité Judío-Americano en Miami. La declaración final indicada en el sitio del Comité afirma que los representantes de las diversas comunidades involucradas "ratifican su solidaridad con el Estado de Israel en su legitimidad histórica". Escribiendo en el boletín 'Palabra Israelita', el dirigente derechista de la comunidad judía chilena, Gabriel Zaliasnik, aseveró que el ministro de defensa es de "las personas con inclinaciones políticas y con interés de que la causa de Israel" sea apoyada. El parlamentario chileno Eugenio Tuma, en cambio, manifestó que Hinzpeter "es un militante de la causa israelí".
 
El 5 de noviembre de 2012, 'El Ciudadano' publicó un cartel que afirmaba que Rodrigo Hinzpeter había hecho el servicio militar en Israel, señalando lo inconveniente de que alguien con esos supuestos antecedentes asumiera la jefatura del ministerio de defensa chileno, lo que disparó la ira de la comunidad judía de Chile. Pareciera que Hintzpeter "fue a Israel a hacer su servicio militar al terminar su enseñanza media, el que normalmente dura dos años, y tres para los que siguen su formación en el aparato de Inteligencia del Mossad". Sea como sea, Hinzpeter jamás aclaró a qué fue a Israel, si en efecto hizo el servicio militar o si recibió algún tipo de instrucción armada en ese país, y tampoco ha negado que mantenga vínculos con el Mossad, el servicio de inteligencia israelí.
 
Como señala el analista geopolítico argentino Leopoldo Markus, "los peligros actuales de las fuerzas armadas y el Estado chileno, tanto de la designación de Hinzpeter como de la doctrina oficial de aquellas, es que resulta funcional a los intereses del Comando Sur de los EE.UU. y de Israel. Más allá de los argumentos justificatorios de la intervención interna de las fuerzas armadas chilenas en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado, ello encubre el objetivo de que se hallen preparadas para reprimir posibles futuros alzamientos de la población chilena".  
 
Markus agrega que, incluso unas bien entrenadas, equipadas y "reorientadas" fuerzas militares chilenas estarían siempre listas para cumplir el rol de fuerza de intervención rápida contra Argentina, Bolivia o Perú en caso de producirse revoluciones nacionales o populares que enfrenten al imperialismo y a sus agentes nativos. 
 

Apuntando a la Patagonia 


En lo atinente a la Patagonia argentina, esta hipótesis no es para nada descabellada, considerando la vil política 'desmalvinizadora' y de desarme unilateral que, bajo presión angloestadounidense, vienen impulsando sistemáticamente sucesivos gobiernos de la Argentina 'de la democracia': desde Alfonsín y Menem, hasta el Matrimonio Kirchner.  
 
La Armada Argentina es hoy obsolescente por falta de renovación de material, mantenimiento, combustible y repuestos, facilitando así la depredación pesquera ilegal y el robo descarado del petróleo argentino en el Mar Argentino desde la base inglesa 'Fortaleza Falklands'. Similarmente, la Fuerza Aérea Argentina apenas puede volar con sus unidades vetustas carentes de mantenimiento y combustible. Ni siquiera se repusieron las aeronaves de combate perdidas en la heroica gesta librada contra Inglaterra durante la Guerra de Malvinas de 1982. 
 
Peor aún es la situación del Ejército Argentino, desarmado casi totalmente y sobre cuyos oficiales pesa la mayor carga revanchista de los guerrilleros de ayer que hoy usurpan el poder en ese país.  
 
Dentro de esta amplia estrategia de indefensión nacional, al abandono unilateral de los programas argentinos nuclear, misilístico y aeronáutico -entregados cobarde y traidoramente al enemigo angloestadounidense por Alfonsín y durante la Década Infame del gobierno de Carlos Menem- se suma la retirada argentina de la Antártida, la destrucción del rompehielos Almirante Irizar, y la deshonra cobarde de la fragata-escuela Libertad de la Armada a manos del fondo buitre del sionista pro-gay Paul Singer, gracias a la impericia e irresponsabilidad del gobierno Kirchner en el manejo la deuda externa.   
 
En síntesis, la incursión de Rodrigo Hinzpeter en el ministerio de defensa chileno indica que EE.UU. e Israel potencian su intervención decisiva en la formulación de políticas tendientes a 'asegurar el orden' del pueblo chileno ante la creciente consolidación de la presencia sionista en toda la Patagonia. A la Argentina ya la tienen íntegramente bajo su control; ahora llegó el momento de 'apretarle las tuercas' a Chile.  

Adrian Salbuchi para RT
Adrian Salbuchi es analista político, autor, conferencista y comentador de radio y televisión en Argentina. www.proyectosegundarepublica.com   


Texto completo en: http://actualidad.rt.com/expertos/salbuchi/view/83045-avanza-creacion-nueva-judea-patagonia-blog-salbuchi

sábado, 23 de noviembre de 2013

PATAGONIA CON MILITARES ISRAELÍES: DEFIENDEN DENUNCIA DE SENADOR TUMA.

Eugenio Tuma, Senador de La Araucanía, alto dirigente bacheletista y del PPD, Partido por la Democracia, denunció en CONTROVERSIA-TV y en otros medios, la invasión periódica de la soldadesca israelí en la Patagonia, recorriéndola y cartografiandola.
Los agentes sionistas enquistados en Chile como "comunidad israelita" rasgaron vestiduras, como si no hubiese nada extraño en el deambular de una fuerza militar extranjera por el territorio nacional chileno.

Se pueden ver declaraciones del Senador Tuma sobre este asunto en:

- www.controversia.cl

http://www.hispantv.ir/detail.aspx?id=247914

Compartimos la carta de los palestino-chilenos a El Mostrador:

Señor
German Olmedo Acevedo
Presidente del Directorio “El Mostrador”
PRESENTE:
Nos dirigimos a usted para manifestar nuestra preocupación ante una noticia publicada en el portal www.elmostrador.cl el día de hoy 4 de noviembre del año 2013.
En la sección País de su portal de noticias se presenta el siguiente titular: “Polémica por dichos antisemitas del Senador Tuma contra jóvenes judíos”. Reglón seguido se desarrolla una nota donde se manifiesta la molestia de la comunidad judía en Chile por los dichos del Senador Tuma quien ha señalado su preocupación por la presencia de jóvenes del ejército del Estado de Israel en la  Patagonia Chilena.
Ante esta noticia no podemos dejar de manifestar nuestra profunda preocupación y molestia con su equipo editorial y periodístico de El Mostrador, quienes han caído en el conocido juego de confundir el antisemitismo con cualquier crítica que se haga hacia el Estado de Israel.  Una cosa es que como portal noticioso quieran exponer una noticia, y otra muy distinta es que asuman a priori que los dichos del Senador en cuestión, corresponden a un acto de antisemitismo.
Es ampliamente conocida la estrategia que ocupan los judíos sionistas de igualar toda crítica al accionar del Estado Israelí con un supuesto rechazo racial o religioso. ¿Qué tiene de antisemita señalar que es preocupante que venga anualmente un contingente de jóvenes militares de un país extranjero a nuestro territorio nacional? ¿Acaso no es justo que se investigue sobre el tema si quiera, y que el Estado Israelí de explicaciones de las razones por las cuales envía con recursos estatales a estos jóvenes al sur del país?
Nos preocupa esta situación que se vive en la Patagonia, y no porque sean semitas, sino por ser representantes de un Estado ocupacionista y genocida, que no ha respetado ningún acuerdo internacional, y que tiene el prontuario de violación de derechos humanos más grande del mundo. Un Estado que se sustenta en una ideología que planteó desde sus orígenes ocupar un territorio sin importar la población que ahí existía. Que decidió entre que fuera  Palestina o la Patagonia chileno-argentina el lugar donde asentarse, habiendo sellado con su decisión una dura realidad para el pueblo palestino que hasta el día de hoy se le sigue asesinando, robando y condenando a las más precarias condiciones de vida.
Los dichos del senador no son antisemitas, sino que corresponden a una preocupación política, y por nada racial ni religiosa.
Por tanto, lo primero que esperamos es que el diario “El Mostrador” cambie la nota realizada modificando el titular, y exponiendo ambas visiones del asunto. De no hacerlo, entenderemos que es por tanto un portal que está asumiendo una postura basada en la ignorancia o en una opción política que sería importante que expongan de manera transparente.
El debate específico sobre los intereses del Estado de Israel en la Patagonia, el quehacer de estos militares israelitas en Chile, como a su vez la constante manipulación mediática que hace la comunidad judía en nuestro país, lo dejamos para otro momento. Por ahora esperamos que el periodismo chileno esté a la altura de las circunstancias y no sea presa de las distorsiones históricas, políticas y conceptuales que han difundido por todos sus medios los representantes del sionismo.
Quedamos atentos  a su respuesta.
Atentamente
Comité Chileno de Solidaridad con Palestina

Esta fué la crónica de El Mostrador:
http://www.elmostrador.cl/pais/2013/11/04/polemica-por-dichos-antisemitas-del-senador-tuma-contra-jovenes-israelies/

El Mostrador se hizo eco de los reclamos sionistas por la entrevista dada por el Senador Tuma a www.controversia.cl

lunes, 18 de noviembre de 2013

Mónica Nicoliello: LAS MILICIAS POPULARES TRADICIONALES DE INDIBERYA.

La tradición socio-política hispánica contemplaba que, paralelamente al ejercito profesional (el Ejercito de Línea) se formaran regimientos de milicias, con los vecinos masculinos adultos en condiciones de portar armas, con el fin de defender el territorio en el que habitan y poder enfrentar a los enemigos que pudieran acechar.

Durante los siglos XVII, XVIII y comienzos del XIX, el Ejercito de Línea hispánico se ocupaba de proteger ciertas áreas fronterizas especialmente riesgosas (como la Frontera con los Araucanos al sur del Reino de Chile), pero la seguridad imperial de las Españas en el continente americano estaba al cuidado de los regimientos de milicias, que venían a ser el pueblo en armas para su propia defensa, esto es, constituían la expresión armada de la comunidad organizada.

En el artículo que transcribimos a continuación se narra la experiencia de como los vecinos de la villa de San Carlos y de la ciudad de San Fernando en la Bahía de Maldonado (en lo que es hoy la República Oriental del Uruguay), organizados en milicias, supieron hacer frente al invasor inglés que quería meter su cuña en la Franja Oriental del Río de la Plata en 1804-1806.

En noviembre de 1806, el regimiento de milicianos de San Carlos dirigidos primeramente por el Teniente de Fragata Agustín Abreu Orta, luego por el por el Capitán José Martínez y finalmente por el Teniente Coronel José Moreno, supieron derrotar a las invasoras fuerzas militares inglesas.


Artículo de Mónica Nicoliello, Profesora de Historia en la Universidad de la República (Montevideo) y Doctora en Psicología de la Universidad Atlántica Internacional a Distancia (EEUU). Tomado del sitio web “Indiberya, causa común”. Texto reproducido de EL ESPÍA DIGITAL:

http://85.214.222.163/index.php?option=com_content&view=article&id=3594&Itemid=65

“España en verdad no era un Imperio, por lo cual no había ejército de ocupación español en América, sino algunas guardias fronterizas que no pasaban de unos pocos centenares de hombres, y cuando se producía la invasión de una potencia extranjera como podía ser Gran Bretaña, eran los propios vecinos de las ciudades, pueblos, lugares y villas, los que organizaban milicias populares para su defensa, en muchos casos con apoyo de los indios”
Aunque hubo antecedentes de resistencia popular en Cartagena de Indias y La Habana, la batalla de San Carlos es la primera de la era napoleónica en que se organizan milicias ciudadanas en Hispanoamérica con un claro sentido de patriotismo. Estas milicias populares eran el “brazo armado” de los Cabildos, una especie de embrión de ejército nacional.

Las primeras milicias populares de la era napoleónica.


SAN CARLOS: LAS PRIMERAS MILICIAS POPULARES DE LA ERA NAPOLEÓNICA
Vamos a dedicar este artículo a la heroica resistencia que el pueblo carolino opuso a los ingleses una vez que consiguieron introducirse en la bahía de Maldonado, no solo para que se conserve la memoria de los valerosos vecinos de San Carlos, sino por las consecuencias que esta resistencia tuvo en el Río de la Plata y en el mundo.
A mediados de octubre de 1806 los británicos, dirigidos por el Comodoro Home Riggs Popham, trataron de tomar la ciudad fortificada de San Felipe y Santiago de Montevideo, pero fueron rechazados, y entonces atacaron la ciudad de San Fernando de Maldonado, al este de la Banda Oriental, actual Uruguay, el 20 de octubre.
Cuando pensamos que la defensa de este inmenso territorio dependía de los modestos recursos de los vecinos y milicianos de las villas, fuertes y ciudades fortificadas de la costa, no podemos dejar de sentir admiración por nuestros antiguos paisanos. Ellos siempre eran la primera línea de fuego de cualquier ataque enemigo.
España en verdad no era un Imperio, por lo cual no había ejército de ocupación español en América, sino algunas guardias fronterizas que no pasaban de unos pocos centenares de hombres, y cuando se producía la invasión de una potencia extranjera como podía ser Gran Bretaña, eran los propios vecinos de las ciudades, pueblos, lugares y villas, los que organizaban milicias populares para su defensa, en muchos casos con apoyo de los indios.
Un motivo importante que tenían los ingleses para atacar y destruir las ciudades y villas de Maldonado, era que durante la segunda mitad del siglo XVIII España había instalado allí la Real Compañía Marítima con la finalidad de explotar la pesca y caza de ballenas y de lobos marinos. Al principio su jurisdicción se limitaba a las costas de Maldonado, pero después se la extendió hasta la Patagonia y las Islas Malvinas en la boca del Estrecho de Magallanes, produciéndose un primer movimiento colonizador de los vecinos de Maldonado hacia dichas islas, atraídos, sobre todo, por las oportunidades que ofrecía la explotación de ballenas y focas.
Además, Montevideo era Apostadero Naval del Atlántico Sur, Patagonia e Islas Malvinas. De manera que no tenemos que imaginar a la Banda Oriental (el antiguo Uruguay) proyectándose solamente hacia el Norte, hacia las Misiones, sino hacia el Atlántico Sur.
Ya el 5 de octubre de 1804, cuatro fragatas que habían salido del puerto de Montevideo al mando del Brigadier José de Bustamante y Guerra, fueron apresadas por los británicos frente a Portugal en tiempo de paz, saqueadas, voladas y enviados sus restos a Inglaterra sin mediar declaración de guerra.
En la escuadra viajaba el Mayor General Diego de Alvear con su esposa y sus ocho hijos, de los cuales murieron 7. Fallecieron 269 personas y fueron robados (y nunca devueltos ni reclamados todavía por Uruguay, Argentina o España) 3 millones de pesos. Toda la prensa de la época, y hasta la prensa británica de entonces -en una actitud que contrasta con la británica y ”occidental” de nuestros días- criticó el acto de terrorismo marítimo y clarísima violación del Derecho Internacional; y no vaciló en calificar a Gran Bretaña como Estado-pirata, terrorista y villano:
”Un gran delito acaba de cometerse [...] La ley de las naciones ha padecido la violación más atroz: una potencia amiga ha sido atacada por nuestra fuerza pública en medio de una profunda paz [...] sus leales súbditos han perecido en su defensa, infestando nuestras costas sus saqueados tesoros, y, como el de un pirata, nuestro pabellón tremola sobre el débil, el infeliz y el oprimido”.
En enero de 1806, el Comodoro Home Riggs Popham ocupó por la fuerza El Cabo, en Sudáfrica. Al caer la tarde del día 22 de junio de 1806, una nave española informó en el puerto de la Ensenada de Barragán, al este de Buenos Aires, que el próximo objetivo del Comodoro era la capital del Virreinato del Río de la Plata. El Virrey Rafael de Sobremonte ordenó reforzar posiciones al Capitán de Navío Santiago de Liniers y Brémond, y el 24 de junio publicó un Bando convocando a todos los hombres aptos para tomar las armas a incorporarse en el plazo de tres días a los cuerpos de milicias. Por la tarde, al recibir informes de Liniers sobre movimientos ingleses el Virrey firmó una orden de movilización.
A las 11 de la mañana del día 26 de junio, El General William Carr Beresford marchó sobre la ciudad al son de tambores y banderas desplegadas al viento. Con paso acompasado y aire marcial, avanzó, al son de la gaita, el Regimiento 71 de Highlanders. El Subinspector General de Tropas Pedro de Arce intentó detenerlos con una fuerza de 600 milicianos, pero fueron arrollados.
En consonancia con la política internacional iniciada por Gran Bretaña en 1804, el 20 de octubre de 1806, la ciudad de San Fernando de Maldonado, en Uruguay, fue saqueada, sus mujeres violadas, los sitios religiosos profanados, y en general, sus habitantes sometidos a todo tipo de desmanes por los británicos durante tres días con sus noches. De todo lo cual los fernandinos dejaron luego constancia en acta pública.
Los británicos avanzaron sobre la Banda Oriental hasta que se encontraron con San Carlos, llamada así en honor a Carlos III. Desde su origen, los carolinos fueron un pueblo orgulloso. En 1790, cuando la villa cumplió 27 años elevaron un Memorial donde puede leerse:
”Digan y aleguen las razones que quieran los individuos de Cavildo y vecindario de Maldonado. ¿Quién ha fomentado aquella Ciudad y sus moradores sino los de esta Villa? ¿Quién ha dado víberes para la Tropa de guarnición en aquella ciudad, y en la Isla años atrás, sino los vecinos de esta Villa? ¿Quién ha dado víberes para la Tropa de Santa Teresa, para las de Rio Grande, mientras estubo por España, y también para las dos Brigadas, que estuvieron acampadas de aquí una legua, en el Rincón, sino este vecindario que le socorrió con el pan cocido, con los miles de anegas de arina, que condujeron estos vecinos a dicho Rio Grande, y a Santa Teresa, y también otros víberes de esta Villa, y su jurisdicción?
”De esta Villa, y sus Partidos salieron miles de anegas de Trigo y Maíz en los años pasados para la ciudad de Buenos Ayres y las Malvinas: en una ocasión sola salieron tres mil anegas de Trigo embargado a este vecindario por el comandante Bobadilla a razón de tres pesos anega, el cual se vendió en la Casa de Residencia, por quartillos a razón de seis pesos al vecindario de Buenos Aires en tiempo que no tenía pan que comer. En el mismo año lograron algunos vecinos de Maldonado venderlo a siete pesos, porque allí no había embargo. 

”En este año salieron los Diezmos del presente y del pasado para Buenos Aires. De aquí salen sin cesar todos los meses, y todas las semanas las carradas de trigo, de maíz, de grasa, de sebo, de cueros, de quesos superiores, y mantequilla igual para la Ciudad de Montevideo con las guías del Ministerio de Maldonado, en donde paga este vecindario los Derechos de Alcavala, y  otros”. Fuente: Semanario El Carolino.
Las milicias populares de San Carlos logran detener el avance británico en la Banda Oriental
A este verdadero Imperio, tan peligroso como poderoso, cruel, e implacable, que era ya Gran Bretaña, iban a enfrentarse nuestros humildes paisanos de la villa de San Carlos, sin más recursos que su valentía y determinación. Los ingleses, que venían de saquear San Fernando de Maldonado, se dirigieron a la vecina villa, a 15 kilómetros de distancia, en dirección norte, tratando, evidentemente, de introducirse en la Banda Oriental si podían vencer la resistencia carolina.
La batalla de San Carlos tuvo lugar el 7 de noviembre de 1806, en la intersección de las actuales calles Sarandí y 4 de Octubre. Las milicias populares carolinas, dirigidos por el Teniente de Fragata Agustín Abreu Orta, opusieron a los británicos una feroz resistencia. Herido, Abreu fue conducido en catre de tientos a la casa de Francisco Payán. Falleció el 10 de noviembre y se le dio sepultura en el cementerio de la Iglesia cuya piedra fundamental puso el Padre Amenedo en 1792 y cuyas lápidas antiguas todavía pueden verse. Su contemporáneo José Prego de Oliver le dedicó un poema en el que describió su muerte.
El Teniente Abreu fue reemplazado por el Capitán José Martínez, quien también murió en el campo de batalla. Pero los carolinos no se rindieron, y el Teniente Coronel José Moreno se convirtió en el nuevo jefe de las heroicas milicias.
Las milicias carolinas no solo impidieron que la villa fuera tomada, sino que desde allí lanzaron una contraofensiva, sitiando San Fernando de Maldonado y tratando de reconquistarla. San Carlos asumió entonces la defensa de toda la Banda Oriental e incluso del Río de la Plata. Los británicos se instalaron en Maldonado durante dos meses, hasta que se desencadenó una epidemia. Al abandonarla, saquearon las chacras de los alrededores de San Carlos.
Los héroes del bicentenario (1806-2006)
El 7 de noviembre de 2006, con motivo de los 200 años de la batalla de San Carlos se inauguró la Plazoleta del Combate de San Carlos en honor a los héroes que dieron su vida luchando contra los invasores ingleses.
Resistencia heroica de Montevideo
Con la finalidad de quebrar esta resistencia popular, el 15 de enero de 1807 el Brigadier General Samuel Auchmuty, a las órdenes de John Whitelocke, intimó al Virrey Sobremonte la rendición de Montevideo, que autoridades y pueblo rechazaron como ”un insulto al honor y la lealtad”.
Al día siguiente, los ingleses desembarcaron en la playa de El Buceo. El Coronel Santiago Alejo de Allende trató de impedir el desembarco con milicianos de Córdoba y Paraguay, enrolados por Sobremonte. Entre quienes combatieron ese día se encontraba el futuro héroe nacional José Artigas. El 19 de enero los británicos terminaron de desembarcar y derrotaron a las fuerzas de Allende. Al conocerse la noticia, se convocó en Montevideo una Junta de Guerra, que decidió pedir ayuda a Buenos Aires y enfrentar a los ingleses a la altura del Cristo del Cardal, paraje donde actualmente se encuentra el edificio de la Universidad de la República.
El martes 3 de febrero de 1807, luego de una heroica resistencia, los ingleses se apoderaron de Montevideo. La Ciudad-Fuerte fue sometida a un intenso bombardeo desde el día 21 de enero hasta el 2 de febrero, en que los ingleses lograron abrir una brecha en la muralla a la altura del Portón de San Juan. Al intentar introducirse se trabaron en combate con los nuestros, muriendo en el forcejeo 400 montevideanos y 500 británicos. La ciudad fue saqueada y la población sometida a vejámenes. Por todas partes se veían muertos y heridos que agonizaban horriblemente:
”[...] era necesario ponerlos en el suelo sin más cama que su propia sangre, en que se revolcaban dando quejidos dolorosos y pidiendo el socorro que no se les podía dar [...]” (Testimonio de Pérez Castellano).
Al despuntar la mañana del 3 de febrero de 1807, mientras se disipaba la fría y densa niebla, los vecinos de Montevideo no dejaban de escuchar los ayes de las viudas y heridos del día anterior.
”Escenas de represalias sangrientas, de saqueos y violaciones, fueron perpetrados ese día por los invasores hasta que Auchmuty pudo imponer orden a los suyos. La matanza había sido horrorosa y continua por ambos lados. Por todas partes veíanse filas de heridos, de muertos y de moribundos, y por todas las calles encontrábanse literas que conducían a los pacientes a los hospitales y a las iglesias” -escribió Robertson (comerciante de origen inglés radicado en Montevideo) sobre las consecuencias del asalto británico a la ciudad.
Pero nadie se había rendido. El 6 de febrero la noticia de la toma de Montevideo llegó a Buenos Aires, donde se iniciaron acciones para su Reconquista.

jueves, 14 de noviembre de 2013

Sfeir: LOS TERRITORIOS DE TOMPKINS PONEN EN PELIGRO ESTRATEGICO LA TERRITORIALIDAD DE CHILE.

El candidato presidencial verde de Chile habla de la continuidad territorial de Chile, amenazada por el enclave de Tompkins.
Y habla de la imperiosidad de que Chile sostenga una política exterior completamente independiente de las grandes podencias internacionales.

DECLARACIONES EXCLUSIVAS DEL CANDIDATO PRESIDENCIAL ALFREDO SFEIR A CONTROVERSIA-TV:

Con todos los vastos territorios que ha comprado Tompkins en la Patagonia Chilena se ha puesto en un grave riesgo al espacio territorial estratégico chileno.

En política exterior los chilenos tenemos que tener una posición menos servilista con las grandes potencias, y asumir una posición latinoamericanista.


Capítulo 10. Alfredo Sfeir 2da parte.
“Tenemos que tener una política menos servilista a las grandes potencias internacionales.”


Entrevista al candidato presidencial Alfredo Sfeir Younis.

Segunda parte de la entrevista:

 territorialidad y RR.EE.

“(En el enclave de Tompkins) hay un tema delicado sobre la parte pública de la territorialidad y yo creo que hay riesgo.”
• “En Chile no hay ordenamiento territorial que permita esa discusión estratégica.”
• “No solo existe el valor de mercado, existe el valor estratégico (del territorio).”
• “Ordenamiento territorial significa tener una estrategia de inversión en lo humano, en lo natural y en lo económico.”
• “Al Consejo de Seguridad debemos ir con una posición clara, con una posición realmente de nación.”
• “Tenemos que tener clarísimo que somos un país pacífico. Tenemos que tener una política menos servilista a las grandes potencias internacionales que son la base de estos conflictos.”
• “Si podemos decir a EE.UU. nuestras Fuerzas Armadas no van a servir a esa causa. Si podemos decir a EE.UU. que vamos a votar en contra en el Consejo de Seguridad. Si le vamos a decir a EE.UU que tenemos un sustento de paz.”
• “Nuestro país tiene suficientes (ONG) que están por igual en relación a otros organismos internacionales. Lo importante es tener cuidado quién financia y cuál es el propósito final.”
• “La mejor manera de equilibrar es que nuestras propias organizaciones tengan altura internacional para debatir lo que es nuestro.”
 “Nosotros debemos cambiar este sistema porque el mercado no tiene mecanismos automáticos para corregir lo social ni lo ambiental.”
• “No es posible que el sistema tenga una competitividad que no paga por los impactos sociales negativos, ni por la destrucción ambiental.”
• “En los países desarrollados la consulta pública es lo más normal, aquí hay temor.”
• “Chile tiene un espíritu. Los países tienen que tener una identidad propia.”
• “Identidad es ser más y el dinero no te lleva al ser, el dinero es cortoplacista, la cultura es de largo plazo, nunca vas a poder comprar tu identidad.”
• “El agua es una forma de identidad, el sistema neoliberal destruye el campo valorico de estos recursos.”
• “Necesitamos un gobierno que realmente tenga una visión estratégica donde los recursos naturales sean de toda la ciudadanía.”
 “(En el enclave de Tompkins) hay un tema delicado sobre la parte pública de la territorialidad y yo creo que hay riesgo.”
• “En Chile no hay ordenamiento territorial que permita esa discusión estratégica.”
• “No solo existe el valor de mercado, existe el valor estratégico (del territorio).”
• “Ordenamiento territorial significa tener una estrategia de inversión en lo humano, en lo natural y en lo económico.”
• “Al Consejo de Seguridad debemos ir con una posición clara, con una posición realmente de nación.”
• “Tenemos que tener clarísimo que somos un país pacífico. Tenemos que tener una política menos servilista a las grandes potencias internacionales que son la base de estos conflictos.”
• “Si podemos decir a EE.UU. nuestras Fuerzas Armadas no van a servir a esa causa. Si podemos decir a EE.UU. que vamos a votar en contra en el Consejo de Seguridad. Si le vamos a decir a EE.UU que tenemos un sustento de paz.”
• “Nuestro país tiene suficientes (ONG) que están por igual en relación a otros organismos internacionales. Lo importante es tener cuidado quién financia y cuál es el propósito final.”
• “La mejor manera de equilibrar es que nuestras propias organizaciones tengan altura internacional para debatir lo que es nuestro.”.

domingo, 10 de noviembre de 2013

Morales Lastra: LA CRISIS DEL DISCURSO CULTURAL DE LA DERECHA CHILENA.

La crisis cultural de la derecha

Enrique Morales Lastra |  
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El humanismo racionalista basó la civilización occidental moderna en la tendencia peligrosa a adorar al hombre y sus necesidades materiales. Todo lo que se encontraba más allá del bienestar físico y de la acumulación de bienes materiales, todas las demás necesidades humanas y todas las características de una naturaleza más elevada y sutil, fueron excluidas de la atención del Estado y de los sistemas sociales, como si la vida humana no tuviera sentido superior. Esto proporcionó entrada al Mal, del cual existe en nuestros días un flujo libre y constante. La simple libertad no resuelve, en modo alguno, todos los problemas de la vida humana, y hasta añade varios nuevos”.
Alexander Solzhenitsyn, en “Discurso en la Universidad de Harvard”, 1978.

El discurso cultural de la derecha camina rumbo a sufrir una derrota de proporciones, escribió en su columna del sábado pasado en La Tercera, el fogueado periodista Héctor Soto, con las cifras de la última encuesta CEP encima del escritorio. Idéntico fenómeno observó en su tribuna del mismo medio, sólo unos días antes, el profesor Daniel Mansuy, al que luego —en un diagnóstico parecido— se le sumó el antropólogo Pablo Ortúzar, en una opinión publicada el viernes, en el diario El Mercurio. Para ser más exactos, el joven director de Investigación del IES hacía referencia a la profunda crisis cultural que, según él, azotaría a Chile en estos instantes, a la desastrosa coyuntura, que paradójicamente, tiene lugar en los meses postreros de un exitoso gobierno de centroderecha, y con un Presidente que celebró su victoria —¡qué lejos de todo eso!— en enero de 2010, citando el “Balance Patriótico”, de Vicente Huidobro.
Lo que Soto y Mansuy confunden con un discurso cultural, en verdad no es otra cosa que la cosmovisión “economicista” de la vida, prevaleciente en un amplio espectro del sector que recibe la denominación genérica de derecha. Esa estrategia de legitimación, tanto argumento en la esfera política como en la pública, se hizo añicos, y con especial evidencia, desde las agitaciones sociales de 2011, principalmente, por la incapacidad de esa “narración”, para responder a las necesidades existenciales y vitales más profundas del chileno común y corriente.
¿Se explica de otra manera, el que a pesar del triunfo indudable de las reformas neoliberales aplicadas en el país a partir de 1975, y de que el confort material del que disfruta el ciudadano promedio es único, impensado e inaudito, tan sólo si revisamos las estadísticas respectivas de hace unos 30 años; el que se halle a sólo dos semanas de vencer cómodamente en las próximas elecciones, una candidata cuyo principal eslogan de campaña, deviene en el cambio de ese “modelo” ganador, por otro que es una apuesta incierta y arriesgada, llámese socialista, de bienestar o bolivariana?
En realidad, la derecha chilena —incluimos en este arbitrario concepto a sus vertientes liberal y socialcristiana—, no posee una arenga cultural propia, desde los tiempos en que Mario Góngora intentara enhebrar una, al publicar su “Ensayo histórico sobre la noción de Estado en Chile en los siglos XIX y XX” (1981). La única respuesta que consiguió Góngora, salvo el de los retrueques intelectuales de rigor, sería el de una sonrisa compasiva. La misma que sufriría Gonzalo Vial cuando fue ministro de Educación durante el gobierno militar, y hasta poco antes de su muerte (2009), cuando a través de su columna de los martes en La Segunda, advertía acerca del polvorín social y de valores, en el que descansaban los consensos de la vía chilena al desarrollo.
#01-foto-2-(ojo-NO-hay-foto-1)Ese gesto silencioso y elocuente, el de la sonrisa, también lo recibieron en su momento el influyente —a pesar de— Enrique Campos Menéndez, en su cargo de asesor cultural de la Junta de Gobierno, y la negativa a la idea de transformar la Editora Gabriela Mistral, la rebautizada Quimantú de la UP, en un órgano de impresión masiva de los autores que inspiraban al régimen en su ideario (alcanzaron a lanzarse antologías de Santo Tomás y baratas ediciones de Chesterton); fue la incomprensión que obtuvieron Vittorio di Girolamo y su propuesta del “Chile trino”, para repensar la educación chilena, y hacer de la pantalla estatal, una televisión pública de calidad; para qué nombrar la figura y obra del R.P. Osvaldo Lira, al que los próceres del Partido Conservador de los años ’30, acusaron de “comunista”, y consiguieron de sus superiores la orden de enviarlo a España; o a las penurias que debieron soportar Jaime Eyzaguirre y su revista “Estudios” (la que con una perseverancia ejemplar, el hispanista publicó durante un cuarto de siglo), y a las descalificaciones de extremista con las que debió lidiar siempre Jorge Prat Echaurren y su legendaria “Estanquero”.
La derecha sólo se preocupa de la cultura, cuando tiene la soga al cuello”, me dijo una vez, en 2006, el recordado Campos Menéndez, en la sala de estar de su departamento de la calle Burgos, pleno corazón de Las Condes. Un viento sacudía a la cortina, que cubría tímidamente la ventana.
Mientras, la izquierda progresista carga en sus espaldas, con las ruinas morales y económicas de la Cortina de Hierro, y los errores financieros de la reciente crisis europea y venezolana a sus espaldas; sin embargo aquello, es capaz de instalar en la ciudadanía, gracias a su impresionante aparato editorial y propagandístico, sus consignas engañosas “de un mundo igualitario, de una sociedad mejor”, con un sentido de la épica y de la gesta heroica, que la tiene a un paso de lograr un poder sin contrapeso, que en diciembre de 2009, ni siquiera se imaginaba. Ahí está la clave de tejer un discurso cultural: en transmitir una visión de la realidad, que justifique la razón de la existencia y el porqué se respira las 24 horas del día.
Los chilenos de a pie, los hechos lo demuestran, requieren para levantarse en las mañanas y emprender el viaje a Ítaca de cada jornada a bordo del Transantiago, de ilusiones que van más allá de los “índices de crecimiento”, los números de “pleno empleo”, los informes de la OCDE, y el lugar de la patria en las listas de países con mayores libertades de cualquier índole en el mundo.
La derecha nacional tuvo sus mejores momentos, cuando enredó sus metas de acción política, con la defensa y renovación de los principios eternos de la Civilización Cristiana Occidental: la raíz de la familia, los sentidos verdaderos de la tradición y de la propiedad privada. Para conseguir esos objetivos superiores, el ejercicio y el perfeccionamiento de “la economía libre”, eran un medio, importante, pero sólo eso, un peldaño en el trayecto, jamás el fin único y declarado.


Nota: Este artículo fue publicado originalmente por Chile B, www.chileb.cl. y reproducido de http://viva-chile.cl/2013/11/la-crisis-cultural-de-la-derecha/